ELABORACIÓN
Se rehoga la cebolla y el ajo, todo bien picado, en aceite, cuando empiece a tomar color se incorpora el tomate y se condimenta con sal, pimienta, azúcar y orégano.
Se deja cocer hasta que se forme una salsa espesa.
En abundante agua hirviendo se cuecen los macarrones durante veinte minutos, se escurren y se lavan, escurriéndolos perfectamente.
En una fuente de horno se pone un lecho de macarrones, se cubre con un poco de salsa y se espolvorea de queso, se siguen echando capas de macarrones, salsa y queso hasta terminarlo; la última capa se cubre con abundante queso rallado, se pone la mantequilla hecha bolitas y se mete a horno fuerte cinco minutos.