ELABORACIÓN
Poner las judías toda la noche en agua.
Se ponen a cocer en agua con sal.
Desplumar y limpiar bien la perdiz y atarla con un cordel y añadir a las judías.
Picar la cebolla y los ajos y añadir a las judías, junto con el laurel, el vino, el tomillo, el aceite y la pimienta.
Dejar cocer, muy lentamente un par de horas con la cazuela tapada.
Sacar la perdiz y dejar aparte, para después de desmenuzarla, y ponerla de nuevo en la cacerola.
Dejar hervir cinco minutos más y servir muy caliente.