ELABORACIÓN

Calentar aceite en una sartén a fuego lento y sofreír el ajo.
Cuando se empiecen a dorar los ajos añadir los chiles (se pueden sustituir por guindillas o cayenas), la cebolla y el bacón.
Mientras se pone en una cacerola grande agua y se deja en el fuego para que hierva.
Los italianos no añaden nada al agua, ni sal, ni aceite, ni laurel, como estamos acostumbrados a hacer en algunas partes, para cocer la pasta.
Cuando se haya dorado el bacón con la cebolla y el ajo, se añade el tomate frito (también se pueden usar tomates naturales o tomate casero hecho previamente) y se remueve a fuego lento para que coja sabor y consistencia.
Al llegar el agua a ebullición, se baja el fuego al mínimo y se echa la pasta, volviendo a darle fuerza al fuego.
Esto es para que al echar la pasta en la cacerola el agua no salpique o se salga por el contraste de temperaturas.
Si se quiere la pasta "al dente" el tiempo de cocción es de 7 minutos; "al dente" significa que la pasta queda blanda pero crujiente, es decir, un poquito dura.
Si no gusta así y se quiere mas blanda, se deja más tiempo y se prueba hasta que tenga el punto que más guste.
Se escurre la pasta (sin echar agua fría ni nada), se mezcla con la salsa que se ha preparado, añadiendo el perejil u orégano (al gusto) y se sirve recién hecho.
Se puede acompañar tal cual o con queso parmesano.